Un tren que cubría el trayecto entre Garmisch-Partenkirchen y Múnich, en Alemania, se descalzó en una zona boscosa y el accidente dejó al menos tres muertos y 60 heridos.
Al menos tres personas murieron y unas 60 resultaron heridas, 16 de ellas de gravedad, por el descarrilamiento de un tren regional en los Alpes Bávaros, en el sur de Alemania, informó la policía local.
Varios vagones del tren que cubría el trayecto entre Garmisch-Partenkirchen y Múnich descarrilaron a la altura de Burgrain, por razones que aún se desconocen, informó Stefan Sonntag, portavoz de la Policía.
Las víctimas son «de todas las edades», debido a que una importante cantidad de estudiantes viajaba en el tren de regreso a su casa para pasar un largo fin de semana de tres días, ya que el lunes es feriado.
Las «operaciones de socorro y de evacuación siguen», agregó la policía local y consignó que fueron enviados tres helicópteros con rescatistas desde Austria para asistir en las labores.
Las fotos publicadas por los medios alemanas muestran al tren regional medio descarrilado, con los vagones ladeados en una zona boscosa.
El accidente se produjo a una decena de kilómetros del lugar donde se celebrará a finales de junio la cumbre de líderes del G7, un complejo de 5 estrellas del castillo de Elmau.
Además, este incidente se da dos días después de la entrada en vigor de un abono mensual de 9 euros (9,5 dólares) con el que se pueden tomar todos los trenes regionales de Alemania, una oferta que atrajo a los alemanes y hace temer una sobrecarga de los trenes.
Los responsables de la compañía nacional Deutsche Bahn habían mostrado su preocupación antes de la puesta en marcha de este abono por el estado de una red ferroviaria en plena renovación, tras años de reducciones en la inversión.
El accidente ferroviario más grave de la historia de Alemania se produjo en 1998 por el descarrilamiento de un tren de gran velocidad en Eschede (norte), que provocó 101 fallecidos.
